Sobre los embarazos a temprana edad en América Latina

Sobre los embarazos a temprana edad en América Latina

Durante el último tiempo, la maternidad adolescente ha pasado a ser uno de los principales motivos de preocupación en materia de salud pública para América Latina, ya que se ha comprobado una correlación significativa en lo que respecta a una maternidad temprana y un menor rendimiento nivel educativo, además de unas condiciones más complejas para acceder al mercado laboral.

Además de lo anterior, se anota que investigaciones del Banco Mundial, apuntan a que las mujeres que experimentan un embarazo a temprana edad se encuentran expuestas a soportar las consecuencias tanto a corto y largo plazo del embarazo adolescente de un modo desproporcionado en relación con lo que viven las mujeres que no pasan por esta clase de proceso.

Sobre los embarazos a temprana edad en América Latina

Fecundidad de las adolescentes y el embarazo a temprana edad

De acuerdo con el Banco Mundial, son tres los elementos que se interrelacionan en lo que respecta a la toma de decisiones en torno a la fecundidad de los adolescentes: en primera instancia la racionalidad de las decisiones; la conducta en la que se involucre la autoestima, autocontrol e información; y las normas sociales y las interacciones.

Por otro lado, no hay que pasar por alto que en algunas regiones de América latina, el embarazo a temprana edad puede ser en ocasiones un resultado de un evento que se ha planeado, ya que pasa a ser un medio a través del cual ciertas mujeres, en muchos casos de sectores pobres, logran tomar el control de su vida e incluso acceden a un cierto respeto de su comunidad, ya que la crianza de un hijo les permite acceder a un canal de movilidad social.

Lo preocupante de una decisión de esta clase, consiste en que en el contexto en el que se mueven estas adolescentes es de pobreza y por ende las posibilidades u oportunidades se limitan para un proyecto de vida en el que además la niña es madre.

Pensando en lo anterior, la sociedad debe iniciar con un proceso de reflexión en el que se analice el embarazo a temprana edad desde la planeación o no de la niña involucrada, además de abogar por clases de sexualidad en las que no sólo se planteen las relaciones sexuales desde la libertad, sino desde los riesgos y sus consecuencias.

Sobre el futuro nos dirá desde que óptica y qué resultados se abstendrán en materia de salud pública sobre un tema de tanta relevancia.